miércoles, 4 de mayo de 2011

Una mermelada de rosella*



Aquí, en Misiones, es otoño. Las rosellas fructifican abundantemente en sus dos últimos meses de producción.
Es tiempo de cosecharlas y elaborar con ellas un sinfín de platillos, refrescos y mermeladas para aprovecharlas en todas sus bondades y sabores.
Sus frutos de pétalos carnosos y tintes de rojo intenso se presentan muy atractivos al momento de servirlos o degustarlos en platos, copas o en rebanadas de panes y tartas caseras.

Cómo hacer una mermelada de rosella?
Luego de cosechar los rojos conos y separar los pétalos de la drupa que contiene las semillas. Solamente aprovecharemos los primeros.



Pesamos todos esos “pétalos”, anotamos cuánto es y los ponemos a hervir en una cacerola, agregando un vaso grande de agua.
Cuando rompe el hervor, reducimos la llama al mínimo y cuidamos que no se pegue en el fondo, revolviendo y revolviendo con cuchara de madera, hasta que prácticamente se desarmen los pétalos y la mezcla sea una abundante y espumosa crema.

Si el peso original fue de un kilogramo de fruta. Le adicionaremos unos 800 gramos de azúcar y seguiremos revolviendo y revolviendo.

Otra vez con fuego mínimo, trataremos de quitarle la consistencia acuosa del producto en elaboración hasta que sea una crema roja ligera.

En un platito de loza pondremos dos cucharaditas cargadas del producto y lo llevaremos al congelador de la heladera por cinco minutos. Si transcurrido ese lapso, al pasar el dedo queda una huella que tarda en borrarse, la mermelada ya está hecha.
(Si la huella se borra de inmediato y tiene aún consistencia líquida, habrá de seguir en el fuego y gira que te gira cuchara de madera).

Logrado el punto, en caliente, con el consabido cuidado y protección, se trasvasa a frascos limpios y esterilizados. Se traban las rocas y se los deja boca abajo hasta enfriarse.

Con un kilo de frutas procesadas da lo suficiente para llenar tres frascos del tamaño mermelada de 700 gramos aproximadamente.
En la heladera deben conservarse los frascos que se abren para consumo. Los demás pueden guardarse en la alacena, en un rincón fresco y seco, para que el placer de tanta exquisitez, perdure una y otra vez.

*Rosella es Hibiscus sabdariffa o Jamaica o Rosa de Jamaica.


2 comentarios:

  1. Gracias por la receta. Voy a preparar ahora. Un abrazo.

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  2. Hola quería preguntarte porque esta riquisima y exótica mermelada no se promociona más. Yo que soy de Salta no puedo encontrar porque no conocen el fruto. Saludos desde Salta la Linda.

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