viernes, 26 de agosto de 2011

UNA CASA DE BOTELLAS



Te lo pueden contar, mostrarte fotografías o bajar un video de la web…
Pero nada es mejor que verla y vivirla un día cualquiera en Puerto Iguazú.
Caminando las calles de tan particular ciudad, luego de haber experimentado aromas y colores de la selva paranaense, llegamos una tarde de agosto a la “Casa Ecológica de Botellas” que tan ingeniosamente construyeron Rosane y Alfredo Santa Cruz...

Todo está armado con botellas descartables de plástico, que alguna vez contuvieron jugos, gaseosas o jabones líquidos. Y para los techos, cuando no los mencionados envases, recurrieron a cajas abiertas de tetra-pack.



Los asientos, las mesas, la cama, los adornos, los juguetes… Manos muy hábiles y mentes muy creativas se hicieron cargo de ellas y recurrieron a todos esos elementos que en la mayoría del orbe se llama despreciativamente: ¡Basura!



Dicen que todo comenzó con el ruego de una pequeña hija que quería una casa de muñecas… Y como los pesos en Argentina nunca sobran ni alcanzan, hubo que echar mano a algún material abundante y ver como se cumplía aquel infantil ruego…

¡¡¡¡Vaya que fueron lejos!!!!
Hoy día viajan de un punto al otro del país enseñando esta saludable práctica ecológica del reciclado y muy pronto su tarea difusora y pedagógica habrá de llevarlos también a Centroamérica.



Alfredo cuenta que ya lleva armadas cincuenta y nueve casas en otros tantos lugares adonde ha ido a enseñar cómo se hace.
Nos cuentan también que esta labor gustosamente y gratuitamente la realizaron en aquellos lugares a los que fueron invitados. Que en un primer tiempo tenían un modelo de vivienda desarmable y que iba de aquí para allá para que todos puedan palparla.



Hoy la tarea educativa continúa siendo gratuita, pero siempre solicitan a los que los convocan, a que junten las botellas y todo lo necesario para reciclar, armar y dejar una casa montada en cada uno de los lugares visitados.
Esta es realmente una gran tarea educativa. Enseñar a sus semejantes qué se puede hacer con un residuo abundante y cuya disolución supera con holgura varias generaciones humanas.
Ecológica manera de echar manos a un problema y a la vez reconvertirlo para solucionar otro gran problema de la humanidad, como lo es la obtención de una vivienda.



En el diario encarar de esta labor, también nuevas ideas y aportes tecnológicos se van sumando. Algunos optan por rellenar las botellas con tierra o arena para darles mayor solidez. Aquí también ya se prueba en cubrir los paneles pre-armados con mallas metálicas y revestirlas con cemento y baldosas cerámicas… Toda experimentación es válida…Porque la dinámica del crear no se detiene.
Y hasta podría aplicarse también en este crecimiento, aquello que alguna vez, el inquieto inventor, Thomas Alva Edison concluyera: “Una experiencia nunca es un fracaso, pues viene a demostrar algo”

Cuando llegue a Iguazú, en su hoja de ruta incluya una visita a esta “Casa Ecológica de Botellas”. Está en la avenida De los Inmigrantes, en el Barrio Las Orquídeas y allí estreche las manos de estos seres maravillosos que hacen honor a aquello del “Hommo-hábilis”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario